Vamos a practicar la puntería y nos vamos a divertir usando canicas con el juego de la «Tocada». Es ideal para niños de 8 años en adelante y para implementarlo sólo necesitas canicas. ¡Sigue leyendo y conoce cómo jugarlo!
Juego con Canicas «¡Tocada!»
Juego de puntería con canicas que puede hacerse al aire libre, en el patio de la escuela o en el interior de la casa para pasar un buen rato. Lo más básico que necesitas saber antes de iniciar con el juego es lo siguiente:
- Edad aproximada: para niños de 8 años o más.
- Tiempo Aproximado: cada ronda puede durar hasta 25 minutos aproximadamente.
- Cantidad de jugadores: 2 jugadores o más.
- Material Requerido: seis canicas por cada jugador.
- Actividad física: baja
Como te puedes dar cuenta, se necesitan pocos materiales y no se requiere de mucho esfuerzo físico así que ahora vamos a ver las instrucciones para poder jugar.
Juego de Canicas y sus Reglas «Tocada»
Todos los juegos tienen reglas o pasos a seguir, de esta manera se garantiza que todos los participantes saben cómo hacerlo y comprenden la forma de ganar.
Ahora veamos las instrucciones del juego para poder jugar de forma armónica:
- Los jugadores se colocan separados por unos 5 metros aproximadamente.
- Cada uno de los jugadores distribuye todas sus canicas menos 1 por el suelo. Antes de hacerlo es importante que cada jugador conozca sus canicas.
- Por turnos,cada jugador lanzará su canica hacia las del otro intentando darle a alguna. Las que resulten tocadas se retiran de la partida.
- Se van realizando lanzamientos hasta que alguno de los jugadores se queda sin canicas, con lo que pierde la partida.
- Si participan más de 2 jugadores, cada uno de ellos solo puede apuntar a las canicas del jugador de su derecha.
¡Muy divertido! ¿Verdad? Este tipo de actividades ayudan a trabajar la motricidad fina, la coordinación ojo-mano, permite que los niños tomen decisiones, que analicen la situación y busquen una solución además de que los juegos ayudan a controlar las emociones puesto que muchas veces el resultado no será favorecedor y los infantes necesitan aprender a canalizar la emoción.
